Fuente: Ferriol Egea
Los indignados han vuelto (aunque nunca se fueron), y triunfó a lo grande, como los toreros en la plaza, esta vez, la del Sol. Muchos los daban por muertos, otros se apresuran a criminalizarlos, pero lo que más me preocupa es la visión que quiere transmitirnos este gobierno como si acampar en la Plaza del Sol una vez al año en forma de protesta ante la mayor crisis que ha vivido el Estado Español en este siglo fuera más criminal que la nacionalización de Bankia.
No sé realmente si ayer en la Plaza del Sol y alrededores había 30,40,50 o más de 100,000 indignados. La cifra en sí es irrelevante, el dato importante es la imagen de un centro de Madrid totalmente abarrotado de gente con ganas de mostrar su contrariedad. La policía procedió por la madrugada al desalojo de Sol de forma violenta cuando ya quedaban pocos “indignados”. Actitud poco inteligente (¿Porqué entonces y no antes?) y que de forma inequívoca da alas al 15M para coger aún más fuerza para hoy y mañana.
Me preocupa que el Gobierno dedique al acto del 15M más policías que en la huelga general. ¿Porqué? ¿Porqué? ¿Porqué? Como diría Mourinho. ¿Es que acaso había más riesgo ayer que en el día de la huelga? ¿Quizás el Gobierno busca y buscaba re-asociar a los 15M con el monumento okupa y los anti-sistema?
¿Quién pagará todo este desplegamiento policial de estos tres días? ¿A santo de qué?
Veo al Gobierno del PP más preocupado en “sofocar” a los “críticos pacifistas” que de buscar responsables del desastre Bankia. ¿Que pasará con todos esos dirigentes del PP que estuvieron al frente de Cajamadrid y Bankia y qué han llevado a la entidad a la bancarrota? No pasa nada, el ciudadano paga. Y si fuera por el gobernante de turno: calla. Pero…ay si se atreven a indignarse ante las “injusticias”! Entonces es cuando Rajoy si se pone firme y manda a la policía a cebarse con la porra.
Si el PP está preocupado por el cumplimiento de la ley y de las ordenanzas públicas que se aplique, pero que sea consecuente y también lo haga cuando los suyos se equivocan y cometen errores graves de gestión que nos llevan al abismo.
Me da que al PP no le gustan las críticas. No sé porqué pienso que le dan pánico cuando cada vez más son mayoritarias. Y cuanto más miedo tienen más les gusta sacar el dóberman a pasear ya sea en forma de “porra” o en forma de ataque mediático de sus secuaces (portadas de La Razón o tertúlias inhumanas de Intereconomía).
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