¿QUÉ QUIERE SR. RAJOY?

Como se sabe, el señor Rajoy está muy preocupado por la imagen de España y ha sugerido-rogado que cesen las manifestaciones de los estudiantes de Valencia para no dañar esa imagen.
Seguramente ignora que manifestaciones de este tipo se celebran asiduamente en toda Europa. E ignora también que esa Europa casi totalmente conservadora no tiene nada que ver con la España que él ahora representa.
Quiere que no se celebren manifestaciones, pero no destituirá a ningún cargo responsable de la violencia policial, al contrario de lo que ocurriría en cualquier país europeo.
Quiere que España continúe a la cabeza de la corrupción europea.
Quiere que el reparto de la riqueza en España sea el más profundo y distante de la Europa conservadora.
Quiere que la brutalidad y crueldad españolas no tengan parangón europeo, con las corridas de toros, correbous y encierros de las fiestas populares en los que mueren varias personas cada año, los toros alanceados hasta la muerte de Tordesillas, cuellos de gallos cortados al galope, y todo tipo de torturas y salvajadas contra los animales.
Quiere que España sea el único país de Europa que sufre una influencia decisiva y perniciosa de la Iglesia católica en todos los ámbitos institucionales y ciudadanos, muy especialmente en la educación.
Quiere que los muertos de un lado de la Guerra Civil continúen desaparecidos en cunetas y barrancos, situación inconcebible en la Europa de imagen conservadora.
Olvida que en solo tres meses él, que tanto fustigó, tiene el récord de mentiras frente a cualquier dirigente europeo.
Quiere que las tradiciones más retrógradas y paralizantes, festivas y religiosas, permanezcan inalteradas.
Quiere que los trabajadores sean esclavos.
Que el salario mínimo interprofesional sea infamante.
Que los empresarios gocen de todo tipo de bulas y prebendas.
Que las penas de cárcel sean aún más duras, cuando son las más altas de la Unión Europea y el número de presos también lo es.
Quiere que las televisiones públicas, estatales y autonómicas manipulen groseramente, y ya está preparando estas últimas para ‘regalarlas’ a bajo precio a sus amigos, como ya hicieron con las digitales.
Quiere tener sujetos a los medios de comunicación.
Quiere que los jueces elijan a los jueces en un alarde gremial y corporativo, creyendo que así va se va a solucionar la desconfianza de los ciudadanos hacia la justicia.
Quiere, como los ciudadanos, despolitizar la justicia y lo dicen abiertamente, ignorando que la justicia es uno de los tres poderes del Estado y por tanto no puede despolitizarse en su gobierno, que no tiene nada que ver con la independencia de los jueces, pero siembra la confusión.
Quiere que los bancos y banqueros sigan siendo nuestras cárceles y nuestros carceleros.
Quiere que la gente no privilegiada las pase putas, sin que la gente sepa por qué.
Quiere que la policía sea de pata negra en su dureza, quiere recuperar el ‘la calle es mía’, quiere que los estudiantes sean sumisos y obedientes y renuncien a ser la esperanza de la demostración de que España es un país vivo.
Lamentable imagen retrógrada y carca la del señor Rajoy y la España que quiere y patrocina. En solo tres meses han enseñado la patita o mejor la pataza.

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