Sí se puede. Este miércoles debemos parar tres desahucios en Madrid

La movilización popular contra los desahucios no deja de crecer en Madrid. Cada vez son más l@s afectad@s que afrontan su situación a través de lucha, acudiendo a la PAH y a las asambleas de barrio para buscar el apoyo de sus vecin@s. Una red cada vez más tupida que, en cada barrio y en cada municipio, convierte la defensa del derecho a la vivienda en acciones y experiencias concretas. Como resultado de este crecimiento, los casos no dejan de aumentar y las asambleas se encuentran en un estado de movilización permanente. El próximo miércoles 22 de Febrero trataremos de evitar tres desahucios en Tetuán, Aluche y Canillejas. !Elige el tuyo y acude!

 

  • Tetuán. 11h, C/Berruguete 5, Estrecho (salida Fulgencio de Miguel). Evento
  • Aluche. 11h, Aluche, acudimos juntos a C/Camarena 238. Evento
  • Canillejas. 9h, C/Castalia 3, Canillejas. Evento

 

BANKIA DESAHUCIA A TERESA, VECINA DE TETUÁN CON UNA INCAPACIDAD PERMANENTE QUE LA IMPIDE TRABAJAR.

Miércoles 22 de febrero a las 11:00h en C/Berruguete 5,Estrecho (salida Fulgencio de Miguel).

Teresa llegó a Madrid procedente de Ecuador en el año 2000, con cuatro hijos a su cargo. Comenzó trabajando en el servicio doméstico y cuidando niños hasta que pudo obtener el permiso de residencia y convalidar sus estudios de Auxiliar de Enfermería. Entonces, los comerciales de una sucursal de Tecnocasa situada junto a su casa comenzaron a presionarla para que dejase de “tirar el dinero” pagando un alquiler e invirtiese en una vivienda, ofreciéndole una hipoteca con una cuota mensual inferior. Aunque sus ingresos no eran suficientes para garantizar el préstamo, la inmobiliaria y la entidad bancaria le convencieron para incluir a un copropietario y dos avalistas en la operación. En menos de un mes, Bankia concedió a Teresa un préstamo de más de 250.000€ sin reparar en las dificultades que podría tener en un futuro para hacer frente a la deuda.

Teresa pagó puntualmente las cuotas hasta que una grave operación pulmonar le obligó a solicitar una baja laboral por enfermedad. Desde entonces, su situación de salud no ha mejorado, habiéndosele reconocido una incapacidad permanente para desarrollar su trabajo. Con los ingresos procedentes de su pensión, Teresa tuvo que afrontar el cuidado de sus hijos y una letra mensual que no dejaba de ascender, pasando súbitamente de 800 a 1890€.

Cuando comenzó a tener problemas para pagar su deuda, Teresa acudió a la sucursal de Bankia a solicitar la dación en pago, convencida de que su única alternativa consistía en regresar a su país tras diez años trabajando en España. La directora de la sucursal no sólo se negó a recoger su solicitud, sino que la insultó y humilló con expresiones racistas, asegurando que estaba “harta de las mentiras de los inmigrantes”, a los que acusó de cambiar constantemente de opinión.

El estado de salud de Teresa ha empeorado y, hace unos días, tuvo que ser ingresada en el hospital a raíz de una crisis derivada de su enfermedad pulmonar de la que aún no se ha recuperado.

Teresa solicita a Bankia que condone una deuda que debía haber quedado saldada con la entrega de su casa y que se aplace su desahucio hasta que recupere mínimamente su estado de salud.

Desde la Asamblea Popular de Tetuán y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca consideramos inadmisible que una entidad que ha sido rescatada con dinero público se niegue a negociar con una afectada que se ve incapacitada para afrontar su deuda debido a problemas de salud. Teresa no podrá volver a ejercer su profesión y tan sólo demanda una oportunidad para regresar a su país libre de cargas. Pero Bankia, que se adjudicó su casa por un 50% del valor de tasación, no está dispuesta a renunciar a la deuda. Mientras tanto, sus directivos perciben millones de euros del bolsillo del contribuyente y arrojan a centenares de familias a la calle para engrosar su inmenso parque de viviendas vacías.

Según datos del Consejo General del Poder Judicial, en el primer semestre de 2011 se ejecutaron una media de 40 desahucios cada día en Madrid. Sin embargo, las entidades financieras siguen negándose sistemáticamente a negociar una posible solución con los afectados, incluso en aquellos casos que presentan un carácter crítico por motivos familiares o de salud.

Si el gobierno rescata a la banca con nuestros impuestos ¿quién nos rescata a nosotr@s?

La vivienda es un derecho, no un negocio. ¡Dación en pago y alquiler social ya!

PAREMOS EL DESAHUCIO DE JORGE, VECINO DE ALUCHE

Miércoles 22 de febrero a las 11.00h en la estación de Metro y Cercanías Aluche, para acudir juntos a la C/Camarena 238.

La historia de Jorge no difiere mucho de la de los otros miles de dramas que se están produciendo en este país. Drama que tienen como factor principal los desmanes y, en muchos casos, las estafas masivas por banqueros y especuladores en la concesión de créditos hipotecarios, con la connivencia de los poderes públicos y la clase política.

Jorge llegó a España desde Perú, con la esperanza de dar una vida digna a sus hijos pequeños. Para ello trabajo duro durante una década en el sector de la construcción. Le ofertaron una hipoteca con el banco Santander, mediante la cual Jorge pudo comprar una vivienda. Empezó pagando una letra de 650€, pero finalmente esa cantidad ascendió a 1200€. Una cifra difícil de pagar, e imposible cuando quedó en paro. Para colmo, Jorge había contratado un seguro de desempleo que le habría ayudado a pagar, pero que el banco se negó a activar.

El banco Santander se quedó con la casa de Jorge por el 50% del precio de tasación, y en este momento quiere desahuciarle para poder tener una casa más vacía y cuadrad sus balances. Aún así, Jorge quedará con una deuda inasumible que afectará a sus condiciones de vida durante décadas..

Es indignante que los bancos causantes de la crisis y rescatados con dinero público estén llevando a la ruina y marginación a familias enteras que solo quieren prosperar trabajando honradamente. Somos los ciudadanos los que debemos protestar contra estas injusticias si queremos que los políticos tomen medidas.

La violación del derecho a una vivienda digna para millones de personas, constituye un atentado tanto al articulo 47 de la Constitución como a la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 y al Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, suscrito por el Estado español en 1977. El derecho a la vivienda no puede estar regido por las reglas del mercado.

  • No más familias en la calle. Dación en pago retroactiva ya.

Esto va contigo. Te esperamos.

!UNA FAMILIA CON DOS NIÑOS SE PUEDE QUEDAR EN LA CALLE EN CANILLEJAS!

Miércoles 22 de febrero a las 9h en C/Castalia 3,Canillejas.

Detrás de las terribles cifras de la crisis económica, que se está cebando con los barrios más humildes, encontramos rostros y familias concretas. Rostros como los de Mónica, Javier y sus dos hijos que, si no lo impedimos, se quedarán en la calle el próximo 22 de febrero. Ese día, Bankia tratará de tomar posesión de su vivienda, que está situada en el número 3 de la calle Castalia. Si lo consigue, el desahucio de esta familia pasará a engrosar la vergonzosa estadística de desalojos judiciales en la región, que se traduce en 40 expulsiones diarias de media. Y mientras las familias pierden su casa, Bankia, cuyos directivos perciben salarios millonarios, sigue engordando su stock de viviendas vacías. ¿Para qué?

Como le ha sucedido a decenas de miles de personas en España, Mónica Ramos y Javier Narváez tuvieron que dejar de pagar las letras de su piso cuando sus cuotas subieron hasta cifras imposibles. Nunca han dejado de trabajar, pero llegó un momento en que la suma de sus salarios no era suficiente para cubrir los 1.650€ de la mensualidad. Como tantos otros deudores de buena fe, la familia solicitó en dos ocasiones una refinanciación de su hipoteca y después la dación en pago de su vivienda. Pero la antigua caja de ahorros pública tenía claros sus planes: hacerse con el inmueble y seguir cobrando una deuda que hoy asciende a 150.000€. Bankia se quedó con la casa por el 50% de su valor de tasación en una subasta judicial y ahora tratará de hacerse con ella, dejando en la calle a una nueva familia trabajadora y con una deuda vitalicia.

Mónica y los suyos no tienen otro hogar que el de Canillejas. Hoy les ha tocado a ellos, pero mañana puedes ser tú. Es hora de parar esta sangría.

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